18 junio 2006

Mousel

MouselVinieron a visitarnos mis padres y nos llevaron a un restaurante típico belga, de esos en los que sirven mejillones con patatas fritas (plato nacional belga, no os engaño) y delicias como el plato de riñones y mollejas que se pidió (y dejó, por supuesto) María. Mis padres pidieron vino pero yo vi una cerveza desconocida y no me pude resistir. Se llamaba Mousel y estaba riiicaaaa y fresssquiiiitaaaa.

02 junio 2006

Pharaonen Beer

Pharaonen Beer"Ya que vamos al Delirium Café, ¿por qué no aprovechar?" Creo recordar que ese día me tomé no tres sino cuatro cervezas nuevas diferentes pero hubo una que se me escapó. :-O Esta última la elegí por el sistema "qué etiqueta más chula" y también por el de "¿cerveza egipcia? ¡eso tengo que probarlo!". No son muy buenos sistemas y la cerveza sabía a pis de camello. Y creo que, como ya me pasó con la Lola, me hicieron el lio y no era birra egipcia sino belga. ¡Cachis! Y encima no pude quitar la etiqueta porque debía de estar pegada con superglue por lo menos (se me acabó el agua caliente antes de poder despegar una esquina). En definitiva: una mierda.

Wladimir II

Wladimir IIUn rato después de la Cuvée des Monts me pedí otra cerveza, esta vez usando para elegirla la táctica de abrir la página al azar y señalar donde sea. Me salió la Wladimir II y no recuerdo si era muy buena o no. Probablemente era del montón tirando a rica, pero quien sabe (esto es lo que pasa cuando vas dejando "los deberes" para un mes después).

Cuvée des Monts

Cuvée des MontsMi amigo y ex-vecino Iago pasó brevemente por Bruselas (estaba de Erasmus en Lille) con unos amigos. Como él es también muy cervecero no tuve ni que proponerle ir al Delirium Café... ya lo tenía en mente ("Oye, ahora vamos al bar ese que tiene el record Guinness de más cervezas en carta, ¿no?"). Yo había elegido una birra rubia turbia pero no la tenían y el camarero me recomendó esta Cuba/Cosecha de los Montes. Mereció la pena.

28 mayo 2006

Sagres

SagresVivimos al lado del barrio portugués de Bruselas y últimamente, con la llegada del calor, cuando salgo de clase de francés me paro a tomar una (o dos) birras en algún barrio de la zona. Esta Sagres, que estaba bastante rica, me la tomé en uno de esos días con temperaturas increibles para Bélgica (más de 35º seguro) en un bar llamado O'Reguas. ¿Cómo es que esta cerveja no llega a España?

16 mayo 2006

Steendonk

Steendonk
Creo que ya he hablado alguna vez de las blanche. Por si acaso pondré un recordatorio: es un tipo de cerveza clarita y alimonada (a veces te la ponen con una rajita de limón y todo), algo así como una clara ya hecha. Yo la ódio. No me gusta nada y su sabor afrutado me da más sed de la que me quita. Acabé con esta por error. Es una de las tres cervezas de barril que comentaba que sirven en el Belga. La gente que iba conmigo se había pedido una blanche cada uno pero yo me había pedido una bière normal. Y se equivocaron. ¡Quel dommage!

06 mayo 2006

Tuborg Gold

Tuborg Gold

Hace poco probé la Turborg en el aeropuerto de Roma. Pues ahora tocaba la Tuborg Gold. Estaba bastante rica. Me la tomé en el comedor del Parlamento Europeo. Como se cuidan los parlamentarios. Yo estaba allí porque fue el día de Puertas Abiertas.

26 abril 2006

Bel

Bel
Esta es la birra que más bebo en Bruselas. No es que sea la mejor, no me malinterpreteis. Pero es la cerveza más común en los bares. Cuando pides "une bière", así sin más, tienes muchas posibilidades de beberte una de estas. En el bar que más frecuento, el Café Belga, tienen 3 cervezas de barril y esta es mi favorita de las tres. Muchos vasos de estos he vaciado ya (y muchos quedan) y acumulo unos cuantos en mi cocina.

Cuando me vaya de Bruselas voy a echar de menos la Bel. Repito que no es la mejor, pero le he cogido cariño.

22 abril 2006

St. Idesbald

St. Idesbald

Pese a que suelo preferir las cervezas rubias, esta estaba muy rica. La tomé en un bar que está en la calle donde nació Audrey Hepburn (¡si, era belga!).

19 abril 2006

Tuborg

TuborgEn el aeropuerto de Roma, donde hicimos la primera escala al volver de Marruecos, nos pedimos unas pizzas y una birras para matar el hambre (la comida del avión, aunque gratis, había sido horrible). El dinero escaseaba y nos tuvimos que pedir una cervecilla pequeña cada uno. Al ir a recogerla (se pagaba en un sitio y te la daban en otro) el encargado nos preguntó mirando el recibo: "Pequeñas, ¿no?". Ante la vista de los enanos vasos de plástico, yo bromeé: "No, hemos pedido las jarras gigantes estas". El simpático italiano no lo dudó y nos sirvió dos jarrazas de 40 cl a cada uno (pese a que le avisamos de que era una broma). ¡Viva Italia! La birra en si estaba bien, pero nos supo a gloria al ser (casi) gratis.